Lynera es una palabra creada e inédita, fácil de pronunciar en español y que evoca discretamente a la luna y la naturaleza (por la raíz 'Ly' que puede asociarse fonéticamente a 'luna', y 'nera', que recuerda acepciones místicas o elegantes). Este nombre no es descriptivo ni genérico, no utiliza palabras comunes del sector y no contiene ningún término técnico o geográfico; resulta memorable, original y proyecta un halo místico, ideal para una marca de perfumes que busca diferenciarse desde la emoción y la experiencia sensorial.

Selvunia es una invención inédita, resultado de la fusión sutil de 'selva' y la sonoridad de 'luna', sin ser descriptiva ni directa. Evoca misterio, bosque y magia lunar, sin copiar palabras genéricas del rubro ni deidades, respetando criterios legales. Fácil de pronunciar, recordable y con una sonoridad envolvente, este nombre transmite el equilibrio perfecto entre lo natural, lo místico y lo etéreo, alineándose con la emoción y tono deseados.

Lunavia surge de la combinación personalísima de 'luna' y la raíz 'via', que puede evocar idea de viaje o camino, sugiriendo una travesía sensorial a través de la fragancia, sin ser descriptivo o genérico ni incurrir en términos conocidos del rubro. Es inédito, fácil de leer y pronunciar en español, y reúne suavidad, misterio y evocación emotiva, ideal para un universo de marca en torno a la exploración del yo.